Cómo limpiar correctamente el cochecito del bebé
La limpieza regular del cochecito del bebé es importante porqué el carrito es mucho más que una artículo de uso diario. Los padres solemos invertir bastante dinero en el modelo perfecto para nosotros y nuestro bebé y por eso es importante realizar un mantenimiento óptimo para que no se deteriore.
Limpieza regular del cochecito
Los extensos paseos por el campo o las compras por la ciudad hacen que los neumáticos y el chasis del cochecito entre en contacto casi a diario con polvo, charcos, suelos embarrados y piedrecitas. Además es probable que el bebé coma en el cochecito y se ensucie de migas, churretes de fruta, o se derrame leche u otro líquido en el textil del asiento.
Para temperaturas húmedas y frías en invierno y otoño, se recomienda la limpieza semanal del chasis. Y, si llevas el carrito a la playa, también es importante una limpieza de las ruedas y del chasis de regreso a casa porqué la brisa marina y la arena contienen sal que es corrosiva. Si descubres manchas de óxido, puedes tratarlas con un abrillantador de cromo. Todas las juntas deben lubricarse con vaselina o aceite de automoción pero nunca hay que echarlo en los rodamientos de las ruedas. Para la limpieza de las ruedas hay que usar silicona en spray que no hace grasilla y evitará que se pegue el polvillo y porquería de la calle.
Para que podamos disfrutar de los cochecitos durante mucho tiempo, también hay limpiar las cubiertas o neumáticos y el chasis con regularidad. Además, no debemos descuidar las bisagras y los frenos.
Cómo limpiar las partes textiles lavables del cochecito
A menos que en la etiqueta se indique lo contrario, las fundas extraíbles de los cochecitos de bebé se pueden lavar con un detergente suave en la lavadora a temperaturas de hasta 30° C. Para los bebés se recomiendan los detergentes para la piel sensible, que protegen contra las irritaciones de la piel. Para manchas difíciles, se puede aplicar un spray quitamanchas antes de lavar.
Puede darse el caso que haya partes textiles del carrito que no sean desmontables, en ese caso, podemos usar un spray para tapicerías. Después, no se debe permitir que el niño se suba a la silla de paseo durante al menos 3 horas para evitar el contacto con las substancias tóxicas. A veces, será necesario frotar las manchas a conciencia.
Las manchas en la capota se pueden eliminar con agua tibia y detergente. Después, es mejor dejarla secar abierta en la bañera, pero debe evitarse la luz solar directa. Esto puede blanquear el material. Yo en alguna ocasión me he atrevido a meter la capota con el arco en la lavadora y no ha pasado nada, pero podría haberme llevado un disgusto.
Consejo: Si no quieres arriesgarte a que las fundas se encojan en la secadora, déjelas secar al aire libre.
Limpieza de partes textiles no lavables
Los cochecitos tienen partes textiles, como el respaldo o la base del asiento, que por lo general no se pueden quitar. Agua caliente, una esponja y un detergente suave son suficientes para limpiar estos textiles. También se pueden utilizar toallitas húmedas para eliminar manchas.
Limpieza de las ruedas y de las piezas de plástico del cochecito
Los neumáticos de los cochecitos son sin duda los más afectados. Para protegerlos del desgaste, también deben limpiarse regularmente. Hoy en día, la mayoría de marcas tienen las ruedas desmontables que se pueden limpiar fácilmente en una bañera con agua tibia, un poco de detergente y un cepillo.
Las ruedas fijas pueden rociarse con una manguera de jardín y limpiarse con un cepillo. Los ejes de las ruedas, la suspensión y todas las conexiones también deben lubricarse con aceite.
Para mantener las ruedas en funcionamiento durante mucho tiempo, como dije antes, existen aerosoles de silicona especiales para ruedas de cochecitos que evitan la oxidación. El spray también evita que las piezas de goma y plástico se vuelvan frágiles y el efecto lubricante impide que las ruedas chirríen y giren mejor.
Todas las demás partes de plástico o aluminio de la silla de paseo se pueden limpiar con agua tibia, un jabón suave y un paño.
¿Sueles limpiar regularmente el cochecito de tu bebé?